Autor: Juan Dario Rodas - Escépticos Colombia
La serie de artículos “Asaltados en su buena fe” es un ejercicio de análisis sobre las implicaciones sociales de las creencias religiosas en el pueblo colombiano. Se pretende identificar los elementos utilizados por las diferentes doctrinas para desinformar al creyente y coartar su capacidad de razonamiento sobre temas delicados del comportamiento humano.
La serie de artículos “Asaltados en su buena fe” es un ejercicio de análisis sobre las implicaciones sociales de las creencias religiosas en el pueblo colombiano. Se pretende identificar los elementos utilizados por las diferentes doctrinas para desinformar al creyente y coartar su capacidad de razonamiento sobre temas delicados del comportamiento humano.
El 25 de agosto de 2006 se comenzó a hacer historia en Colombia: por primera vez se practicó un aborto amparado por la ley. Después de una gran cantidad de retrasos causados por la burocracia, obstrucción de personas que están en contra de este procedimiento y objeciones por parte de los altos jerarcas de la iglesia católica, la intervención quirúrgica se realizó sin mayores complicaciones.
Este evento es el desenlace de un caso aberrante de violación a una niña de 11 años por parte de su padrastro y con conocimiento de la madre. La menor llevaba cuatro años de abuso sexual sin que los familiares cercanos hubieran tomado medidas al respecto. Como al momento de la denuncia del crimen, la niña tenía diez semanas de embarazo, el proceso médico debió realizarse a la menor brevedad para evitar complicaciones posteriores que pondrían en riesgo su vida.
Hablar de aborto en Colombia es difícil por la larga tradición de religiones judeocristianas que cubren casi la totalidad del territorio. Durante años la postura autoritaria y regente de la iglesia católica había impedido tratar este y muchos temas, presentando como argumento las doctrinas de fe basadas supuestamente en la Biblia. Por fortuna, los cambios políticos presentes en un país que quiere ser considerado civilizado, han impulsado el surgimiento gradual de espacios para el libre desarrollo de la persona, sin restricciones del Estado o grupos religiosos, por mayoritarios que sean.
Para llegar a este punto se han tenido que dar reformas radicales en el Estado. Primero fue un cambio en la Constitución Política que antepone los derechos humanos sobre cualquier cosa. La reforma también crea La Corte Constitucional para velar por la correcta ejecución de la norma. Dicha Corte deja sin piso jurídico al concordato del Estado con El Vaticano1 a pesar de múltiples demandas, y da su puntada final en el tema con la sentencia que despenaliza el aborto en casos especiales 2.
En dicha sentencia, la corte plantea que no constituye delito si una mujer colombiana quiere abortar en los siguientes casos:
En el caso de la niña de 11 años, todos los requisitos legales y m édicos estaban dados. Se realizó la denuncia del delito, se capturó al delincuente quien confesó su crimen. Los médicos dictaminaron que un proceso de gestación a tan corta edad de la madre, trae serios riesgos para su salud, pues al estar en etapa de crecimiento, hay gran probabilidad de que el bebé nazca prematuro y con serias complicaciones.
Entonces, ¿por qué la demora en realizar el procedimiento? Durante las semanas previas, los opositores del aborto presentaron gran cantidad de obstrucciones para impedir esta acción humanitaria. Algunos médicos se escudaron en su juramento hipocrático y lo sagrado de la vida humana. También se hicieron sentir con todo su peso los principales grupos religiosos del país.
En un debate racional es posible refutar todos los argumentos presentados por estas personas. Para ello, es necesario conocer en detalle las bases de sus afirmaciones.
En el caso de la medicina, la situación se presenta como una errónea mezcla entre la ciencia y lo sagrado. El texto original del Juramento Hipocrático no es el utilizado actualmente cuando un profesional es admitido como miembro en el ejercicio de la medicina. La versión actual corresponde a fragmentos del Código Internacional de Ética adoptado en las Asambleas Generales 2a y 3a de la Asociación Médica Mundial 3. Si bien en ningún lugar se hace referencia a lo “sagrado de la vida”, tiene apartes que son de especial interés:
(..)
“ EL MEDICO DEBE en todos los tipos de práctica médica, dedicarse a proporcionar un servicio médico competente , con plena independencia técnica y moral , con compasión y respeto por la dignidad humana .”
(..)
“EL MEDICO DEBE recordar siempre la obligación de preservar la vida humana .”
Y el texto del juramento, contiene estas importantes afirmaciones:
(..)
NO PERMITIRÉ que consideraciones de edad, enfermedad o incapacidad, credo, origen étnico, sexo, nacionalidad, afiliación política, raza, orientación sexual, clase social o cualquier otro factor se interpongan entre mis deberes y mi paciente. ”
(..)
NO EMPLEARÉ mis conocimientos médicos para violar los derechos humanos y las libertades ciudadanas , incluso bajo amenaza. ”
La medicina es una praxis, una técnica de la biología aplicada a los seres humanos. Es una técnica que busca curar enfermedades, lesiones, diversos tipos de dolencias y en general cualquier situación que ataque el bienestar físico. Se evidencia entonces una influencia cristiana sobre la medicina que impone valores religiosos sobre la práctica. A pesar de sus juramentos, los médicos se ven presionados por líderes religiosos a no proporcionar sus servicios competentes en favor de la vida humana, so pena de ser excomulgados y condenados por toda la eternidad.
Sería de gran interés que una práctica científica como la medicina pudiera definir lo sagrado y establecer patrones medibles, repetibles y verificables que se puedan utilizar cuando se requiriera determinar si algo es sagrado o no4. Claro está, la iglesia reconoce que esto no es posible. ( Evangelium Vitae, Numeral 60). 5
En la cultura primitiva hebrea se tenía la concepción de que la vida de un ser humano comenzaba en el momento de la primera respiración, teniendo como referente el mito de la creación humana por Dios, en el cual éste le insufló con su aliento el alma que lo convierte en humano. Con el tiempo, comenzaron a surgir otras doctrinas que dictaminan que el comienzo de la vida humana se da en el momento de la concepción.
Hoy día se sabe sin ninguna duda que la vida de los seres humanos parte de la unión de dos gametos. Una vez que el ovulo es fertilizado por el espermatozoide, se genera un zigoto y este de acuerdo a las instrucciones genéticas que tiene en el núcleo, comienza a partirse en dos células, en cuatro, en ocho… En una relación geométrica se empiezan a generar más células y a medida que cambia el ambiente químico de las diferentes partes de la mórula 6, se empiezan a diferenciar entre si. Estas células generan órganos, piel, huesos, cerebro y en general todos los tipos de tejido que se encuentran en el cuerpo humano.
Hoy en día se sabe que la capacidad de raciocinio, la autoconciencia y la inteligencia del hombre se basa exclusivamente en lo cerebral. Los seres humanos son seres pensantes porque tienen un cerebro desarrollado. Tienen dentro de su cráneo un neurocomputador de procesamiento paralelo de altísima capacidad de cómputo y una gran cantidad de circuitos cerebrales que le permite estar autoconciente, aprender, modificar lo que aprende, pensar, amar, sentir y en términos generales todos los procesos mentales que son el resultado de la vida humana.
Hoy en día existen procedimientos diagnósticos como la amniocentesis7, que permite detectar trastornos cromosómicos como el síndrome de Down; defectos estructurales como la espina bífida o la anencefalia y muchos trastornos metabólicos hereditarios y poco comunes.
Incluso es posible hoy en día en Colombia hacer operaciones intrauterinas como la realizada a comienzos de 2006 en la Clínica Universitaria Bolivariana de Medellín, donde científicos altamente calificados, actuando de manera diligente, lograron hacer la corrección de defectos de tubo neural abierto en el feto, malformación que constituye la segunda causa más frecuente de las alteraciones congénitas del sistema nervioso central.
Ahora bien, no es lo mismo un feto de 5 o más meses que un embrión en las primeras etapas del proceso de gestación. La moral cristiana quiere hacer creer que esa mórula que no tiene células diferenciadas para procesamiento nervioso tiene algo llamado alma: un ente indetectable, inmensurable y que pertenece al ámbito de la mitología. Por esa alma que “está ahí”, en ese puñado de células que no se han diferenciado todavía, se quiere hacer creer que es una persona humana.
Es preferible usar exámenes diagnósticos en las primeras semanas del proceso de gestación para saber si el feto tiene una malformación que haga inviable su vida y decidir la interrupción del embarazo, que someter a la madre a la tortura y el maltrato de gestar a una criatura que más adelante no tendrá posibilidad alguna de sobrevivir. En la psiquis de la mujer se desarrolla rápidamente el sentimiento maternal y es inmoral someterla al tormento de la muerte inevitable de su hijo. ¿Acaso se pretende darle consuelo con frases como “Dios lo quiso así”?
Los grupos que intentan prohibir el aborto, de manera deshonesta presentan publicidad engañosa, haciendo creer a la sociedad que los abortos en las etapas finales del embarazo, considerables bajo cualquier perspectiva como homicidio, son lo mismo que abortar en las etapas tempranas. Es una postura blanca y negra que no permite ningún punto intermedio4 y causa desinformación que impide a las personas formarse un criterio serio sobre el tema; es una atrocidad y una inmoralidad que viola los derechos de las mujeres. Si no lo considera así, tenga presente el siguiente caso.
El comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas decidió a favor de una mujer a la que le impidieron el acceso al aborto, violando sus derechos humanos fundamentales. Fue la primera vez que un organismo internacional de Derechos Humanos hace responsable a un gobierno de asegurar el acceso a servicios para el aborto legal.
En 2001, la peruana Karen Llontoy de 17 años, cursaba la decimocuarta semana de embarazo cuando los médicos de un hospital público de Lima diagnosticaron que el feto presentaba anencefalia, una malformación incompatible con la vida por falta de cerebro. Después de mucho deambular, Karen decidió abortar. El aborto es legal en Perú por razones terapéuticas; sin embargo, el Estado no adoptó reglas claras para ello y las mujeres con estos problemas quedan a merced de la decisión de los médicos de los servicios públicos. A Karen se le negó el acceso por disposición del director del hospital que la atendía y fue obligada a llevar a término el embarazo. Incluso llegó a tener que amamantar al bebé los cuatro días que vivió. El fallo específicamente establece que se violó el derecho a no ser sometido a tratos inhumanos, crueles y degradantes , el derecho a la privacidad, y el derecho a la protección especial de los niños. Además ordenó al gobierno de Perú a reparar a Karen Llontoy y a adoptar las regulaciones que garanticen a las mujeres el acceso al aborto legal.
¿Considera usted que los médicos en este caso actuaron con plena independencia técnica y moral, respetaron la dignidad humana y no violaron los derechos humanos? ¿Considera usted que es moral decirle a esta mujer que su hijo nació de esa forma y que no sobrevivió porque “Dios lo quiso así”?
En el caso de Colombia, La Conferencia Episcopal al conocer el texto de la sentencia de la Corte Constitucional declaró en un comunicado lo siguiente:
(..)
“Es un fallo de graves consecuencias que atenta contra los fundamentales valores culturales, morales y religiosos de nuestra patria”. (..) “ 'Nosotros hemos de obedecer a Dios antes que a los hombres' (Hech 5, 29). Las leyes y los fallos jurisprudenciales podrán determinar la legalidad de algunos actos, pero no por este hecho se podrán considerar como morales y buenos. Decidir contra la vida de un ser humano en cualquier circunstancia seguirá siendo siempre un acto inmoral, y más grave aún, si es contra el más indefenso de todos. ‘ El aborto y el infanticidio son crímenes abominables ' (Concilio Vaticano II, Constitución Gaudium et Spes n. 51)”. 8
(..)
Y cuando efectivamente se logró realizar el procedimiento quirúrgico, dicha Conferencia declaró:
(..)
Finalmente reiteramos la posición de la Iglesia Católica expresada en Documentos tan luminosos como la Carta Encíclica “Evangelium Vitae” sobre el valor y el carácter inviolable de la vida humana. “A este propósito, escribe el Papa Juan Pablo II, resuena categórico el reproche del Profeta: “Ay de los que llaman al mal bien y al bien mal!, que dan oscuridad por luz y luz por oscuridad” (Is. 5,20). Precisamente en el caso del aborto se percibe la difusión de una terminología ambigua… que tiende a ocultar su verdadera naturaleza y a atenuar su gravedad en la opinión pública... Pero ninguna palabra puede cambiar la realidad de las cosas: el aborto procurado es la eliminación deliberada y directa, como quiera que se realice, de un ser humano en la fase inicial de su existencia que va de la concepción al nacimiento” (E.V.58). 5
Hay que reconocerlo. El colombiano promedio no lee la Biblia, simplemente se queda con la opinión que le imponen sus líderes religiosos. Con la defensa acérrima que hacen los creyentes en estos mitos judeocristianos de la vida en una mórula, se consideraría que lo más probable es que tengan unas bases muy fuertes en sus libros guía; debe aparecer con mucha claridad cómo su dios defiende la vida de los niños, de los fetos que están en el proceso de gestación. 4
La gran sorpresa ocurre al buscar en la Biblia un respaldo escrito para la defensa de estos fetos y se encuentra la posición opuesta. He aquí algunos versículos de la Sagrada Escritura :
Éxodo 21, 22-23:
“Si en una riña los contendientes golpean a una mujer encita y la hacen abortar pero sin poner en peligro su vida, se les impondrá la multa que el marido de la mujer exija y que en justicia le corresponda. Si se pone en peligro la vida de la mujer esta será la indemnización: vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, golpe por golpe, herida por herida.”
Aquí se evidencia claramente la postura del Antiguo Testamento con respecto al feto que estaba en el vientre de una mujer. Una indemnización monetaria adecuada que les imponga el padre del feto abortado, el esposo de la mujer. Si la mujer muere, se aplica simplemente la ley del talión, los hombres que peleaban deben morir. Para los escritores bíblicos del Éxodo, el feto no es una vida humana.
Como se mencionó previamente, la mitología hebrea tenía como comienzo de la vida la primera respiración. Recuerde que en el Génesis, cuando se dice como Adán tomó vida, se narra que Yahvé creo una figurita de polvo de la tierra, y le insufló su aliento, y en ese momento pasó a ser alma viviente. Por esa razón, por esa postura mitológica del Génesis, en el Éxodo ocurre lo mismo; si el feto no ha salido del vientre de la madre y no ha respirado, no está vivo, no es una persona. 4
Existen unos versículos en el libro de Isaías (si, el mismo que cita la Conferencia Episcopal Colombiana) en los cuales el profeta habla sobre las maldiciones que caerán sobre Babilonia por haberle causado tanto daño a los hijos de Israel, el pueblo elegido por Dios. Aquí se evidencia cuanto respeta Dios la vida humana desde el vientre e incluso los primeros años de infancia. ¿Qué opina Dios sobre el aborto y el infanticidio?
Isaías 13, 13-19
“Por eso haré que tiemble el cielo y que la tierra se mueva de su sitio, por el furor del Señor todopoderoso en el día de su ardiente ira. Como gacela acosada, como rebaño sin pastor, cada uno se volverá a su propio pueblo, cada cual huirá a su propia tierra, al que atrapen lo traspasarán, al que caiga preso morirá a filo de espada. Ante sus propios ojos estrellarán a sus pequeños y saquearán sus casas y violarán a sus mujeres. Miren, Yo incito contra ellos a los Medos, pueblo al que no le importa la plata ni se deleita en el oro. Con sus arcos traspasarán a los jóvenes, no se apiadarán del fruto del vientre ni tendrán compasión de los niños. Babilonia, la perla de los reinos, la gloria y el orgullo de los caldeos, quedará como Sodoma y Gomorra cuando Dios la destruyó”.
En este texto, cuando hablan de "matar fruto del vientre", esto es aborto. Esto es más claro en el siguiente versículo bíblico. Aquí, cuando los padres cometen algún pecado, impureza o idolatría contra Yahvé, los que pagan son los hijos.
Oseas 9, 14
“Dales señor, lo que les debes dar. Dales vientres que aborten y pechos resecos.”
En este texto, la maldición que cae sobre Israel por haberse inclinado hacia Baal, es vientres que aborten. Si los fetos son personitas, hijitos indefensos, lo que estaría haciendo Yahvé en esta situación es un castigo atroz: que la mujer se embarace y después aborte; que haga fecundación y luego que el feto esté en un estado avanzado de desarrollo, sea abortado.
Si los cristianos consideran que el aborto es un crimen atroz porque se asesina a una "persona inocente", entonces su propio dios también es asesino, un dios que hace abortar a las mujeres sobre todo aquellas que tengan el infortunio de ser las esposas de los pueblos enemigos de Israel.
Aunque hay muchos otros versículos por el estilo, se presenta un ejemplo final:
Oseas 13, 16
“El pueblo de Samaria cargará con su culpa por haberse revelado contra su dios, caerán a filo de espada, a los niños los lanzarán contra el suelo, y a las embarazadas les abrirán el vientre.”
Esta deidad matricida e infanticida, que hace traspasar a espada a las mujeres embarazadas y que estrella niños contra el piso, es la que los cristianos creen obedecer cuando, en su celo irracional, tratan de mostrar el aborto terapéutico en etapas tempranas como un crimen, un asesinato.
Si esto le parece un dios justo, entonces está incurriendo en una inconsistencia asombrosa, nada extraño cuando se refiere a las incoherencias de los cristianos modernos que tanto daño causan a unos sectores de la población, para el caso de este artículo, a las mujeres embarazadas.
Referencias
[1]. República de Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C-027 del 5 de febrero de 1993.
[2]. República de Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C-355 del 10 de Mayo de 2006.
[3]. World Medical Asociation (WMA). Código Internacional de Ética. Adoptado por la 3ª Asamblea General de la AMM Londres , Inglaterra, octubre 1949. La última enmienda fue realizada por la 35ª Asamblea Médica Mundial Venecia, Italia, octubre 1983. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006. http://www.wma.net/s/policy/c8.htm
[4]. Toro Agudelo, Hernán Darío. Implicaciones sociales de las creencias religiosas judeocristianas. Presentado en el podcast de Internet “Sonrisa Escéptica” de Infidelguy.com. Febrero 22 de 2002.
[5]. El Vaticano. Juan Pablo II. Carta Encíclica EVANGELIUM VITAE sobre el valor y el carácter inviolable de la vida Humana. Publicado Marzo 25 de 1995. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/encyclicals/documents/hf_jp-
ii_enc_25031995_evangelium-vitae_sp.html
[6]. Wikipedia. Definición de Mórula. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
http://es.wikipedia.org/wiki/M%C3%B3rula
[7]. Wikipedia. Definición de Amniocentesis. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
http://es.wikipedia.org/wiki/Amniocentesis
[8]. El Vaticano. Constitución pastoral GADIUM ET SPES sobre la iglesia en el mundo. Numeral 51. Publicado Diciembre 7 de 1965. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
http://www.vatican.va/archive/hist_councils/ii_vatican_council/documents/vat-
ii_const_19651207_gaudium-et-spes_sp.html
[9]. EL Tiempo. Hospital Simón Bolívar practicó primer aborto legal en Colombia a una niña de 11 años. Artículo publicado Agosto 25 de 2006. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
http://www.eltiempo.com/bogota/2006-08-25/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR-
3195817.html
Este evento es el desenlace de un caso aberrante de violación a una niña de 11 años por parte de su padrastro y con conocimiento de la madre. La menor llevaba cuatro años de abuso sexual sin que los familiares cercanos hubieran tomado medidas al respecto. Como al momento de la denuncia del crimen, la niña tenía diez semanas de embarazo, el proceso médico debió realizarse a la menor brevedad para evitar complicaciones posteriores que pondrían en riesgo su vida.
Hablar de aborto en Colombia es difícil por la larga tradición de religiones judeocristianas que cubren casi la totalidad del territorio. Durante años la postura autoritaria y regente de la iglesia católica había impedido tratar este y muchos temas, presentando como argumento las doctrinas de fe basadas supuestamente en la Biblia. Por fortuna, los cambios políticos presentes en un país que quiere ser considerado civilizado, han impulsado el surgimiento gradual de espacios para el libre desarrollo de la persona, sin restricciones del Estado o grupos religiosos, por mayoritarios que sean.
Para llegar a este punto se han tenido que dar reformas radicales en el Estado. Primero fue un cambio en la Constitución Política que antepone los derechos humanos sobre cualquier cosa. La reforma también crea La Corte Constitucional para velar por la correcta ejecución de la norma. Dicha Corte deja sin piso jurídico al concordato del Estado con El Vaticano1 a pesar de múltiples demandas, y da su puntada final en el tema con la sentencia que despenaliza el aborto en casos especiales 2.
En dicha sentencia, la corte plantea que no constituye delito si una mujer colombiana quiere abortar en los siguientes casos:
- El embarazo constituya peligro para su vida o salud.
- Exista grave malformación del feto que haga inviable su vida.
- El embarazo sea producto de una conducta constitutiva de acceso carnal o acto sexual abusivo, sin consentimiento (violación).
- Cuando sea el producto de inseminación artificial o transferencia de óvulo fecundado sin consentimiento.
En el caso de la niña de 11 años, todos los requisitos legales y m édicos estaban dados. Se realizó la denuncia del delito, se capturó al delincuente quien confesó su crimen. Los médicos dictaminaron que un proceso de gestación a tan corta edad de la madre, trae serios riesgos para su salud, pues al estar en etapa de crecimiento, hay gran probabilidad de que el bebé nazca prematuro y con serias complicaciones.
Entonces, ¿por qué la demora en realizar el procedimiento? Durante las semanas previas, los opositores del aborto presentaron gran cantidad de obstrucciones para impedir esta acción humanitaria. Algunos médicos se escudaron en su juramento hipocrático y lo sagrado de la vida humana. También se hicieron sentir con todo su peso los principales grupos religiosos del país.
En un debate racional es posible refutar todos los argumentos presentados por estas personas. Para ello, es necesario conocer en detalle las bases de sus afirmaciones.
En el caso de la medicina, la situación se presenta como una errónea mezcla entre la ciencia y lo sagrado. El texto original del Juramento Hipocrático no es el utilizado actualmente cuando un profesional es admitido como miembro en el ejercicio de la medicina. La versión actual corresponde a fragmentos del Código Internacional de Ética adoptado en las Asambleas Generales 2a y 3a de la Asociación Médica Mundial 3. Si bien en ningún lugar se hace referencia a lo “sagrado de la vida”, tiene apartes que son de especial interés:
(..)
“ EL MEDICO DEBE en todos los tipos de práctica médica, dedicarse a proporcionar un servicio médico competente , con plena independencia técnica y moral , con compasión y respeto por la dignidad humana .”
(..)
“EL MEDICO DEBE recordar siempre la obligación de preservar la vida humana .”
Y el texto del juramento, contiene estas importantes afirmaciones:
(..)
NO PERMITIRÉ que consideraciones de edad, enfermedad o incapacidad, credo, origen étnico, sexo, nacionalidad, afiliación política, raza, orientación sexual, clase social o cualquier otro factor se interpongan entre mis deberes y mi paciente. ”
(..)
NO EMPLEARÉ mis conocimientos médicos para violar los derechos humanos y las libertades ciudadanas , incluso bajo amenaza. ”
La medicina es una praxis, una técnica de la biología aplicada a los seres humanos. Es una técnica que busca curar enfermedades, lesiones, diversos tipos de dolencias y en general cualquier situación que ataque el bienestar físico. Se evidencia entonces una influencia cristiana sobre la medicina que impone valores religiosos sobre la práctica. A pesar de sus juramentos, los médicos se ven presionados por líderes religiosos a no proporcionar sus servicios competentes en favor de la vida humana, so pena de ser excomulgados y condenados por toda la eternidad.
Sería de gran interés que una práctica científica como la medicina pudiera definir lo sagrado y establecer patrones medibles, repetibles y verificables que se puedan utilizar cuando se requiriera determinar si algo es sagrado o no4. Claro está, la iglesia reconoce que esto no es posible. ( Evangelium Vitae, Numeral 60). 5
En la cultura primitiva hebrea se tenía la concepción de que la vida de un ser humano comenzaba en el momento de la primera respiración, teniendo como referente el mito de la creación humana por Dios, en el cual éste le insufló con su aliento el alma que lo convierte en humano. Con el tiempo, comenzaron a surgir otras doctrinas que dictaminan que el comienzo de la vida humana se da en el momento de la concepción.
Hoy día se sabe sin ninguna duda que la vida de los seres humanos parte de la unión de dos gametos. Una vez que el ovulo es fertilizado por el espermatozoide, se genera un zigoto y este de acuerdo a las instrucciones genéticas que tiene en el núcleo, comienza a partirse en dos células, en cuatro, en ocho… En una relación geométrica se empiezan a generar más células y a medida que cambia el ambiente químico de las diferentes partes de la mórula 6, se empiezan a diferenciar entre si. Estas células generan órganos, piel, huesos, cerebro y en general todos los tipos de tejido que se encuentran en el cuerpo humano.
Hoy en día se sabe que la capacidad de raciocinio, la autoconciencia y la inteligencia del hombre se basa exclusivamente en lo cerebral. Los seres humanos son seres pensantes porque tienen un cerebro desarrollado. Tienen dentro de su cráneo un neurocomputador de procesamiento paralelo de altísima capacidad de cómputo y una gran cantidad de circuitos cerebrales que le permite estar autoconciente, aprender, modificar lo que aprende, pensar, amar, sentir y en términos generales todos los procesos mentales que son el resultado de la vida humana.
Hoy en día existen procedimientos diagnósticos como la amniocentesis7, que permite detectar trastornos cromosómicos como el síndrome de Down; defectos estructurales como la espina bífida o la anencefalia y muchos trastornos metabólicos hereditarios y poco comunes.
Incluso es posible hoy en día en Colombia hacer operaciones intrauterinas como la realizada a comienzos de 2006 en la Clínica Universitaria Bolivariana de Medellín, donde científicos altamente calificados, actuando de manera diligente, lograron hacer la corrección de defectos de tubo neural abierto en el feto, malformación que constituye la segunda causa más frecuente de las alteraciones congénitas del sistema nervioso central.
Ahora bien, no es lo mismo un feto de 5 o más meses que un embrión en las primeras etapas del proceso de gestación. La moral cristiana quiere hacer creer que esa mórula que no tiene células diferenciadas para procesamiento nervioso tiene algo llamado alma: un ente indetectable, inmensurable y que pertenece al ámbito de la mitología. Por esa alma que “está ahí”, en ese puñado de células que no se han diferenciado todavía, se quiere hacer creer que es una persona humana.
Es preferible usar exámenes diagnósticos en las primeras semanas del proceso de gestación para saber si el feto tiene una malformación que haga inviable su vida y decidir la interrupción del embarazo, que someter a la madre a la tortura y el maltrato de gestar a una criatura que más adelante no tendrá posibilidad alguna de sobrevivir. En la psiquis de la mujer se desarrolla rápidamente el sentimiento maternal y es inmoral someterla al tormento de la muerte inevitable de su hijo. ¿Acaso se pretende darle consuelo con frases como “Dios lo quiso así”?
Los grupos que intentan prohibir el aborto, de manera deshonesta presentan publicidad engañosa, haciendo creer a la sociedad que los abortos en las etapas finales del embarazo, considerables bajo cualquier perspectiva como homicidio, son lo mismo que abortar en las etapas tempranas. Es una postura blanca y negra que no permite ningún punto intermedio4 y causa desinformación que impide a las personas formarse un criterio serio sobre el tema; es una atrocidad y una inmoralidad que viola los derechos de las mujeres. Si no lo considera así, tenga presente el siguiente caso.
El comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas decidió a favor de una mujer a la que le impidieron el acceso al aborto, violando sus derechos humanos fundamentales. Fue la primera vez que un organismo internacional de Derechos Humanos hace responsable a un gobierno de asegurar el acceso a servicios para el aborto legal.
En 2001, la peruana Karen Llontoy de 17 años, cursaba la decimocuarta semana de embarazo cuando los médicos de un hospital público de Lima diagnosticaron que el feto presentaba anencefalia, una malformación incompatible con la vida por falta de cerebro. Después de mucho deambular, Karen decidió abortar. El aborto es legal en Perú por razones terapéuticas; sin embargo, el Estado no adoptó reglas claras para ello y las mujeres con estos problemas quedan a merced de la decisión de los médicos de los servicios públicos. A Karen se le negó el acceso por disposición del director del hospital que la atendía y fue obligada a llevar a término el embarazo. Incluso llegó a tener que amamantar al bebé los cuatro días que vivió. El fallo específicamente establece que se violó el derecho a no ser sometido a tratos inhumanos, crueles y degradantes , el derecho a la privacidad, y el derecho a la protección especial de los niños. Además ordenó al gobierno de Perú a reparar a Karen Llontoy y a adoptar las regulaciones que garanticen a las mujeres el acceso al aborto legal.
¿Considera usted que los médicos en este caso actuaron con plena independencia técnica y moral, respetaron la dignidad humana y no violaron los derechos humanos? ¿Considera usted que es moral decirle a esta mujer que su hijo nació de esa forma y que no sobrevivió porque “Dios lo quiso así”?
En el caso de Colombia, La Conferencia Episcopal al conocer el texto de la sentencia de la Corte Constitucional declaró en un comunicado lo siguiente:
(..)
“Es un fallo de graves consecuencias que atenta contra los fundamentales valores culturales, morales y religiosos de nuestra patria”. (..) “ 'Nosotros hemos de obedecer a Dios antes que a los hombres' (Hech 5, 29). Las leyes y los fallos jurisprudenciales podrán determinar la legalidad de algunos actos, pero no por este hecho se podrán considerar como morales y buenos. Decidir contra la vida de un ser humano en cualquier circunstancia seguirá siendo siempre un acto inmoral, y más grave aún, si es contra el más indefenso de todos. ‘ El aborto y el infanticidio son crímenes abominables ' (Concilio Vaticano II, Constitución Gaudium et Spes n. 51)”. 8
(..)
Y cuando efectivamente se logró realizar el procedimiento quirúrgico, dicha Conferencia declaró:
(..)
Finalmente reiteramos la posición de la Iglesia Católica expresada en Documentos tan luminosos como la Carta Encíclica “Evangelium Vitae” sobre el valor y el carácter inviolable de la vida humana. “A este propósito, escribe el Papa Juan Pablo II, resuena categórico el reproche del Profeta: “Ay de los que llaman al mal bien y al bien mal!, que dan oscuridad por luz y luz por oscuridad” (Is. 5,20). Precisamente en el caso del aborto se percibe la difusión de una terminología ambigua… que tiende a ocultar su verdadera naturaleza y a atenuar su gravedad en la opinión pública... Pero ninguna palabra puede cambiar la realidad de las cosas: el aborto procurado es la eliminación deliberada y directa, como quiera que se realice, de un ser humano en la fase inicial de su existencia que va de la concepción al nacimiento” (E.V.58). 5
Hay que reconocerlo. El colombiano promedio no lee la Biblia, simplemente se queda con la opinión que le imponen sus líderes religiosos. Con la defensa acérrima que hacen los creyentes en estos mitos judeocristianos de la vida en una mórula, se consideraría que lo más probable es que tengan unas bases muy fuertes en sus libros guía; debe aparecer con mucha claridad cómo su dios defiende la vida de los niños, de los fetos que están en el proceso de gestación. 4
La gran sorpresa ocurre al buscar en la Biblia un respaldo escrito para la defensa de estos fetos y se encuentra la posición opuesta. He aquí algunos versículos de la Sagrada Escritura :
Éxodo 21, 22-23:
“Si en una riña los contendientes golpean a una mujer encita y la hacen abortar pero sin poner en peligro su vida, se les impondrá la multa que el marido de la mujer exija y que en justicia le corresponda. Si se pone en peligro la vida de la mujer esta será la indemnización: vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, golpe por golpe, herida por herida.”
Aquí se evidencia claramente la postura del Antiguo Testamento con respecto al feto que estaba en el vientre de una mujer. Una indemnización monetaria adecuada que les imponga el padre del feto abortado, el esposo de la mujer. Si la mujer muere, se aplica simplemente la ley del talión, los hombres que peleaban deben morir. Para los escritores bíblicos del Éxodo, el feto no es una vida humana.
Como se mencionó previamente, la mitología hebrea tenía como comienzo de la vida la primera respiración. Recuerde que en el Génesis, cuando se dice como Adán tomó vida, se narra que Yahvé creo una figurita de polvo de la tierra, y le insufló su aliento, y en ese momento pasó a ser alma viviente. Por esa razón, por esa postura mitológica del Génesis, en el Éxodo ocurre lo mismo; si el feto no ha salido del vientre de la madre y no ha respirado, no está vivo, no es una persona. 4
Existen unos versículos en el libro de Isaías (si, el mismo que cita la Conferencia Episcopal Colombiana) en los cuales el profeta habla sobre las maldiciones que caerán sobre Babilonia por haberle causado tanto daño a los hijos de Israel, el pueblo elegido por Dios. Aquí se evidencia cuanto respeta Dios la vida humana desde el vientre e incluso los primeros años de infancia. ¿Qué opina Dios sobre el aborto y el infanticidio?
Isaías 13, 13-19
“Por eso haré que tiemble el cielo y que la tierra se mueva de su sitio, por el furor del Señor todopoderoso en el día de su ardiente ira. Como gacela acosada, como rebaño sin pastor, cada uno se volverá a su propio pueblo, cada cual huirá a su propia tierra, al que atrapen lo traspasarán, al que caiga preso morirá a filo de espada. Ante sus propios ojos estrellarán a sus pequeños y saquearán sus casas y violarán a sus mujeres. Miren, Yo incito contra ellos a los Medos, pueblo al que no le importa la plata ni se deleita en el oro. Con sus arcos traspasarán a los jóvenes, no se apiadarán del fruto del vientre ni tendrán compasión de los niños. Babilonia, la perla de los reinos, la gloria y el orgullo de los caldeos, quedará como Sodoma y Gomorra cuando Dios la destruyó”.
En este texto, cuando hablan de "matar fruto del vientre", esto es aborto. Esto es más claro en el siguiente versículo bíblico. Aquí, cuando los padres cometen algún pecado, impureza o idolatría contra Yahvé, los que pagan son los hijos.
Oseas 9, 14
“Dales señor, lo que les debes dar. Dales vientres que aborten y pechos resecos.”
En este texto, la maldición que cae sobre Israel por haberse inclinado hacia Baal, es vientres que aborten. Si los fetos son personitas, hijitos indefensos, lo que estaría haciendo Yahvé en esta situación es un castigo atroz: que la mujer se embarace y después aborte; que haga fecundación y luego que el feto esté en un estado avanzado de desarrollo, sea abortado.
Si los cristianos consideran que el aborto es un crimen atroz porque se asesina a una "persona inocente", entonces su propio dios también es asesino, un dios que hace abortar a las mujeres sobre todo aquellas que tengan el infortunio de ser las esposas de los pueblos enemigos de Israel.
Aunque hay muchos otros versículos por el estilo, se presenta un ejemplo final:
Oseas 13, 16
“El pueblo de Samaria cargará con su culpa por haberse revelado contra su dios, caerán a filo de espada, a los niños los lanzarán contra el suelo, y a las embarazadas les abrirán el vientre.”
Esta deidad matricida e infanticida, que hace traspasar a espada a las mujeres embarazadas y que estrella niños contra el piso, es la que los cristianos creen obedecer cuando, en su celo irracional, tratan de mostrar el aborto terapéutico en etapas tempranas como un crimen, un asesinato.
Si esto le parece un dios justo, entonces está incurriendo en una inconsistencia asombrosa, nada extraño cuando se refiere a las incoherencias de los cristianos modernos que tanto daño causan a unos sectores de la población, para el caso de este artículo, a las mujeres embarazadas.
Referencias
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[2]. República de Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C-355 del 10 de Mayo de 2006.
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http://www.vatican.va/archive/hist_councils/ii_vatican_council/documents/vat-
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[9]. EL Tiempo. Hospital Simón Bolívar practicó primer aborto legal en Colombia a una niña de 11 años. Artículo publicado Agosto 25 de 2006. Consultado en Internet, Agosto 25 de 2006.
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3195817.html
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