Es fácil creerse los cuentos de los creacionistas cuando se conoce poco sobre el mundo natural. Se podría creer la historia narrada por la Biblia de un diluvio universal en el que la humanidad fue destruida hace unos 4 mil años del que solo se salvaron Noé, su familia y una pareja de cada especie animal (de las especies "limpias", es decir toros, carneros y los permitidos para comer a los israelitas, entraron siete por especie). Pero hay muchos problemas al aceptar esta historia como cierta. Uno de tantos es el de la distribución geográfica actual de plantas y animales.
¿Cómo llegaron los koalas a Australia desde el monte Ararat? ¿Cómo sobrevivieron en su travesía desde Armenia hasta Australia sin hojas de eucaliptos para comer en su camino? Los eucaliptos son árboles endémicos de Australia y los koalas se alimentan casi exclusivamente de estas plantas. Si aceptamos el supuesto de los creacionistas de que los continentes no se han movido, en contra de lo que propone la confirmada teoría de la tectónica de placas, tenemos que imaginarnos a los koalas arribando a Australia de manera milagrosa (¡quizás dios les abrió el mar para que pasaran como les sucedió a los Judíos en el Mar Rojo!)
Uno de los grupos animales que más contradice la realidad histórica del diluvio universal, es el de las aves. En muchas islas oceánicas se pueden encontrar aves no voladoras o que tienen poca habilidad para hacerlo; parece pues imposible que hayan llegado allí desde el monte Ararat. Para conocer algunas de las especies de aves no voladoras de las diferentes islas del mundo, realizaremos un "recorrido" que empezará en la isla de Madagascar y que continuaremos en dirección al oriente.
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Madagascar | Pájaro Elefante | Aepyornis maximus |
Mauricio | Dodo | Raphus cucullatus |
Mauricio | Rascón de Mauricio | Aphanapterix bonasia |
Reunión | Solitario de Reunión | Ornithaptera solitarius |
Rodríguez | Solitario de Rodríguez | Pezohaps solitarius |
Australia | Emú | Dromaius novahollandie |
Nueva Guinea | Casuario grande | Casuarius unapenndiculatus |
Nueva Guinea | Casuario de casco | Casuarius casuarius |
Nueva Guinea | Casuario de Bennet | Casuarius bennetti |
Nueva Guinea | Rascón áptero | Megacrex inepta |
Nueva Guinea | Paloma faisán de Melanesia | Otidiphaps nobilis |
Nueva Zelanda | Moa | Dinornio maximus |
Nueva Zelanda | Moa | Dinornio gazella |
Nueva Zelanda | Moa | Dinornio robustus |
Nueva Zelanda | Moa | Pachyornio elephantopus |
Nueva Zelanda | Moa | Pachyornio mappini |
Nueva Zelanda | Moa | Emeus crassus |
Nueva Zelanda | Moa | Emeus huttoni |
Nueva Zelanda | Moa | Euryapteryx geranoides |
Nueva Zelanda | Moa | Anomalopteryx parvus |
Nueva Zelanda | Moa | Anomalopteryx didiformes |
Nueva Zelanda | Moa | Anomalopterys oweni |
Nueva Zelanda | Moa | Megalapterys didinus |
Nueva Zelanda | Moa | Megalapterys hectori |
Nueva Zelanda | Moa | Megalapterys benhami |
Nueva Zelanda | Kiwi mayor | Apterix haastii |
Nueva Zelanda | Kiwi común | Apterix australis |
Nueva Zelanda | Kiwi menor | Apterix owenii |
Nueva Zelanda | Takahe | Notornis mantelli |
Nueva Zelanda | Kakapo | Strigops haloroptilus |
Nueva Caledonia | Kagú | Rhynochetos jubatus |
Gálapagos (Ecuador) | Cormorán áptero | Nannopeterum harrisi (Phalocrocorax harrisi) |
Como se puede ver, son muchas las especies de aves endémicas de ciertas islas que, además, son incapaces de volar. Tome por ejemplo el famoso dodo y hágase las siguientes preguntas: ¿Cómo pudo llegar un ave pesada y no voladora a una isla oceánica? ¿Por qué llego sólo allí? ¿Cómo sobrevivió fuera de su hábitat natural en la travesía desde el monte Ararat hasta la isla donde reside actualmente sin los recursos de los que depende su alimentación? ¿Cómo sobrevivió a enemigos naturales de los que no podía defenderse? ¿Cómo sobrevivió en el arca durante el supuesto diluvio?
Ahora hágase estas mismas preguntas con las otras 31 especies que se encuentran en la lista. Es imposible que estas aves hubiesen llegado a las islas donde actualmente viven desde la costa continental, tal como lo supone el "modelo" del diluvio universal.
Entonces ¿Por qué se encuentran estas especies únicas en islas particulares? La respuesta es obvia: por que han evolucionado allí. Cuando un grupo de individuos de una especie A, llega a un lugar nuevo (por ejemplo una isla) encuentra nuevas condiciones ambientales y es entonces cuando la selección natural (la supervivencia y reproducción diferencial de unos individuos respecto a otros) empieza a actuar, llevando con el tiempo a formar una especie nueva: A'. Es por esto que la clase de las aves presenta tantas dificultades insalvables al relato del diluvio: por su capacidad de volar, éstas colonizan más fácilmente las islas que los demás grupos animales. Al aislarse geográficamente de las poblaciones originales, la selección natural actúa en formas diferentes que en las poblaciones originales de aves continentales.
Algunas personas se podrán preguntar: ¿Y por qué la evolución produjo aves incapaces de volar? La razón es que en estos nuevos lugares, muchas aves ocuparon papeles ecológicos de frugívoros o ramoneadores terrestres, a lo cual se suma la ausencia de depredadores, lo cual hacía innecesaria la capacidad de volar. En otras palabras: la existencia de nuevas oportunidades ecológicas libres de competencia supone la oportunidad de evolución para una especie nueva. El paleontólogo Stephen Jay Gould nos dice con respecto a la formación de nuevas especies: "En la teoría darwiniana la competencia es el gran regulador. Darwin concibió metafóricamente como un tronco con diez mil cuñas, que representan las especies, apretadamente clavadas a lo largo de su longitud. Una nueva especie únicamente puede entrar en este mundo atestado insinuándose en alguna rendija y haciendo saltar otra cuña (La Vida Maravillosa. Pág. 231)"
Bajo esta perspectiva se puede responder cómo apareció una especie no voladora, como el dodo en la isla Mauricio: esta especie desciende de alguna población de palomas que sí podía volar, que llegó a la isla Mauricio y posteriormente se adaptó al nuevo ambiente, haciéndose al final muy diferente de la especie de paloma parental. Además, al estudiar su anatomía podemos ver que su esternón tenía una minúscula quilla; esto indicaba que sus antepasados en tiempo geológico si podían volar. (¡sería un error del Creador ponerle una quilla a un ave que no vuela!)
Otro aspecto que debemos tener en cuenta para entender la distribución geográfica de plantas y animales es la deriva continental. Para el caso de Madagascar se sabe que se separó del escudo africano hace unos 100 millones de años en el cretáceo medio, derivando hacia el oriente y llevando sus propias plantas y animales. Madagascar puede ser comparada con un "arca de Noé" del cretáceo medio y por esta razón posee una gran cantidad de plantas y animales únicos que evolucionaron en un ambiente diferente al resto de África. Cuando Madagascar se separó de África llevó aves corredoras, como el pájaro elefante y mamíferos primates como los lémures.
Cuando era creacionista hace unos años, me hice muchas preguntas de esta índole y decidí hacérselas a mi pastor (le mostré la tabla anterior). Para mi sorpresa su respuesta fue: "Qué le han de importar esos bichos raros de nombres aún más raros. No le ponga cuidado a eso, no lea sobre eso. Rechace toda oportunidad de debate que se le presente en la Universidad, lea en su Biblia una y otra vez el relato del Génesis y ore para que Dios le convenza". En otras palabras lo que dijo fue: ¡No ponga cuidado a las evidencias, no las mire y éstas dejarán de existir! Ah... ¿y por qué huir al debate? ¿Por qué el creacionismo se muestra tan inconsistente cuando se hacen observaciones cuidadosas y detalladas? ¿Acaso los creacionistas no afirman poseer toda la verdad?
La gran conclusión es que la biogeografía es consistente con la teoría evolutiva y con la teoría de la deriva continental y, por lo tanto, no hay argumentos serios para aceptar el diluvio universal.